La cantante Manuela Bravo recibió a Info Región en la Casa de la Cultura de Brown, donde trabaja como asesora desde hace 7 años. "Creo que la parte de Cultura de Almirante Brown tiene una meta y busca que la cultura sea algo importante", sostuvo.
Jovial, extrovertida, conversadora. Manuela Bravo recibió a Info Región en la Casa de la Cultura de Almirante Brown, donde trabaja como asesora desde hace 7 años.
Nació en la ciudad de La Plata, pero vivió en City Bell hasta los 15. Comenzó su carrera como cantante casi por casualidad, cuando productores musicales la escucharon tararear una canción en Mar Del Plata. Y desde ese momento no paró.
Recorrió muchos escenarios de todo el país con sus canciones melódicas, y también del exterior. Y hasta se animó a conducir un exitoso programa de televisión para los de treinta y pico (o más) en Canal 7.
-¿Cuándo aparece el canto?
-En mi infancia ya estaba el canto. Primero en el colegio primario ya cantaba en los actos escolares. Siempre era la que elegían para cantar o estar en el escenario. Así sea el negrito farolero del 25 de Mayo, o para la primavera la mariposa. Siempre estaba en el escenario. Más de grande fui un día a Mar del Plata y me escucharon por casualidad. Yo quería conocer a Juan José Camero, que estaba enamorada como toda adolescente, y el hijo del empresario de ahí casualmente era amigo mío. Entonces estaba esperando en un camarín para conocer a Camero y me puse a tararear una canción y justo pasó Gino Renni, me escuchó cantar. Me dijo que yo me tenía que dedicar a cantar. Después confesó que yo tenía un pantalón blanco con una cola muy linda. Yo canto gracias a mi traste, viste. En ese momento no sé si vio mi talento.
-¿Qué pasó después de ese camarín? ¿Conociste a Camero?
-Sí, conocí a Camero, fui y soy amiga de él. Pero casualmente ese día estaba el director artístico de lo que hoy es Sony. Me escucharon cantar, me dijeron que fuera a la companía, que me querían escuhar, y yo tenía miedo porque era chica, tenía 17 años. Canté pedacitos de canciones porque no sabía ninguna entera. Dejé los datos y volví a La Plata y seguí con mi vida normal. A los 15 días me llamaron. Este hombre me dijo textualmente: “Vos tenés una estrella que ilumina. Nosotros necesitamos lanzar con todo una nueva voz joven. Tenemos un hit brasileño que se llama ‘El fruto de nuestro amor’, queremos hacer un cover y te elegimos a vos”. Eso fue a fines del `75 o principios del `76. Entonces me dijeron que me eligiera un nombre. Yo me elegí Jesica, un nombre de cabaret. Pero me dijeron que ese nombre no iba. Me dijeron: “Te vas a llamar Manuela” y yo era fanática de Nino Bravo, entonces elegí ese apellido. El tipo me dijo: “Esa es una marca, Manuela Bravo”.
-¿Habías tenido algún tipo de formación?
-No, nada. Un día estaba comiendo con Mirtha Legrand, la gente me paraba y me pedía autógrafos y yo no no sabía qué hacer. Subía a mi auto, un Fitito, y prendía la radio y era en todos lados Manuela Bravo. Yo clavaba los frenos y me escuchaba a mí misma porque era una cosa muy extraña. Hay tanta gente que lucha por tener esto, la fama, o lo que fuera y a mí se me dio por casualidad. En ese momento Mateyko me hace una nota, y me llamaban de todos lados para hacer shows y no tenía nada armado. Entonces me armaron un grupo. Pero también había que armar un repertorio. Yo sólo tenía un lado A y un lado B de un simple. Así que armamos unos temas fuertes, importantes, y salimos a laburar.
-Después de aquel boom, estuviste en Colombia, en Ecuador...
-Fui a representar a Argentina en el año 1978 a Colombia, en algo como un mundial de la canción. Y tuve la suerte de ganarlo. Era un festival de intérpretes. Gané con “A mi manera”, fue una experiencia bárbara. Y después estuve en Ecuador y en México. También estuve en Nueva York, todo eso fue reflejo del éxito del trabajo discográfico. También en Bolivia, Paraguay, Uruguay, estuve en todos lados. Después de un tiempo tuve un accidente bastante feo, en el año 1984. Eso hizo que estuviese inactiva casi un año, y ahí me cambió un poco la cabeza también porque esta profesión produce adicción, y en la pelota del laburo uno no para. Ese accidente me jorobó porque fue en el mejor momento de mi carrera, pero por otro lado me hizo parar y pensar para qué lado quería ir. El aprendizaje fue duro, pero aprendizaje al fin. Y hoy sigo pensando que soy una privilegiada.
-Hiciste televisión también...
-Sí. El programa con más éxito en años de Canal Siete. “Treinta y pico” era un espacio destinado a artistas de otras épocas que hoy no tienen espacio en televisión. Nosotros tuvimos un rating promedio de 7 puntos. No sé por qué no está al aire hoy, era una producción independiente. Hubo problemas con los productores independientes. Hay como una discriminación hacia el cantante melódico, pero es nacional. Porque cuando viene Cristian Castro o Luis Miguel, son todos ídolos, pero con los de acá no sé qué pasa. Yo estoy bastante enojada con ese tema.
-¿Tenés pensado hacer otro proyecto de ese estilo?
-Sí, me gusta ese proyecto, capaz con una imagen distinta, cuidado de otra manera, con otra estética. Pero sí, con los artistas de siempre porque la gente los quiere ver. Además es gente que sigue laburando y la gente los sigue yendo a ver. Yo creo que hay un público de 40 años para arriba que está olvidado. Está olvidado el artista. Hay una cosa de cholulaje a lo extranjero. Arjona llenó 34 Luna Park, dejémonos de joder. No tengo nada en contra de él. Lo conocí a Arjona en el ‘93, cuando no lo conocía nadie, y me encantó. Yo me quejo de la falta de atención a los artistas nacionales.
-Pasás mucho tiempo en Almirante Brown...
-Yo vivo en Capital, pero mi familia materna es toda de la zona de Almirante Brown. Desde hace tiempo empecé a trabajar a full con el equipo de Cultura. -Me parece que es un lugar atípico dentro de lo cultural porque sinceramente acá se trabaja en serio; con un presupuesto para Cultura, con gente joven, con una posibilidad de espacio físico. El público ya es un público cautivo. La cultura es la base del futuro de un país. Si todo el mundo entendiera eso, los países serían más grandes. Porque cuando la gente se educa y piensa, el país se hace más grande. Creo que la parte de Cultura de Almirante Brown tiene una meta y busca que la cultura sea algo importante para los chicos, eso es porque realmente quieren tener un país en serio, un país de gente interesante.
Sus preferidos
-¿Una ciudad?
-La Plata porque nací, Buenos Aires porque vivo, New York porque me encantan las comedias musicales.
-¿Una canción?
-La Cigarra.
-¿Un momento del día?
-A partir del mediodía porque odio levantarme temprano.
-¿Un actor?
-Oscar Martínez y Jack Nicholson.
-¿Una actriz?
-Inés Estevez y Meryl Streep.
-¿Un deseo?
-Que la gente que quiero esté sana.
Nota correspondiente a la publicación del día Jueves de 18 de Enero de 2007
jueves, 3 de mayo de 2007
ENTREVISTA EN "INFO REGION" DIARIO DE LA ZONA SUR DEL GRAN BUENOS AIRES
ENTREVISTA EXCLUSIVA MANUELA BRAVO
“La cultura es la base del futuro de un país”